Jorge Federico Osorio, pianista mexicano de extraordinaria celebridad internacional, será solista con la Orquesta Filarmónica de Boca del Río hoy, en un programa que incluye la Obertura Primavera de Joaquín Beristáin, Noches en los jardines de España de Manuel de Falla y la Tercera sinfonía de Camille Saint-Saëns, con Laura Carrasco en el órgano para esta última partitura. La dirección será de Jorge Mester y dará inicio a las 20 horas, en la sala principal del Foro Boca.
El solista
La estatura artística de Jorge Federico Osorio está fuera de todo cuestionamiento desde decenios atrás. Elogiado y premiado en todo el mundo, se ha presentado como solista con las mejores orquestas de Estados Unidos, Europa, Asia y México en colaboración con directores como Rafael Frühbeck de Burgos, James Conlon, Bernard Haitink, Mariss Jansons, Lorin Maazel, Jorge Mester, Carlos Miguel Prieto, Klaus Tennstedt y Jaap van Zweden, por citar solo algunos.
Su discografía es amplísima y se distribuye a nivel mundial por las firmas Cedille, Artek, ASV, CBS, EMI, IMP y Naxos. Hijo de la pianista Luz María Puente, quien fue su primera maestra, estudió en los conservatorios de México, París y Moscú con los legendarios Bernard Flavigny, Monique Haas y Jacob Milstein. También se preparó con Nadia Reisenberg y Wilhelm Kempff. Actualmente reside en Chicago y es Artista exclusivo Steinway.
Por lo que respecta a Laura Carrasco, es pianista y organista con estudios en las ciudades de Morelia y México, con Licenciatura por la Universidad de Shenandoah y Maestría en Órgano por la Escuela de Artes de Carolina del Norte. Ha ofrecido conciertos en Europa, Estados Unidos, Japón y México. Fue dos veces ganadora de los certámenes de Ejecución Barroca en Winchester, Virginia; premiada en el concurso Jóvenes Talentos de la Sinfónica de Michoacán y ganadora del Concurso Nuevas Generaciones de la Filarmónica de Jalisco, así como finalista en el Concurso Nacional de Piano “Manuel de Falla”.
Las obras del programa
Joaquín Beristáin es un caso singular en la música mexicana. Nacido en 1817 en la Ciudad de México, vivió apenas 22 años pero fue generador de una intensa labor de difusión que incluyó ópera y conciertos sinfónicos. Hábil pianista desde los 17 años, también tocaba el violonchelo en las orquestas de la Iglesia Colegiata de Guadalupe; dirigió la Orquesta de la Ópera de México y varios de los más importantes ensambles del Altiplano. Su Obertura Primavera es una obra corta, ideada como parte de un proyecto que ilustraría musicalmente las estaciones del año, quizá a la manera de Vivaldi aunque en un concepto totalmente sinfónico.
Por lo que toca a Noches en los jardines de España, fue estrenada en Madrid en 1916 y se le considera la más poderosa y fascinante creación para piano y orquesta generada en España. Singular desde donde se le contemple, no es un concierto ni una sinfonía; si acaso, podríamos ubicarle en los terrenos del poema sinfónico, aunque el autor dejó en claro que se trata de sus impresiones en torno de su tierra mediante el empleo del piano como protagonista. La masa instrumental aparece aquí como elemento complementario de la narrativa sonora, en una partitura de extraña belleza y auténtico colorido español.
La Sinfonía número 3 de Saint-Saëns es, a lado de la Sinfonía en Re de César Franck, la obra orquestal más distinguida en el repertorio francés. Su instrumentación exige piano a cuatro manos y un órgano de gran potencia, y fue en Londres en 1886. En su obra, Saint-Saëns recurrió a un procedimiento típico de Franz Liszt (a quien está dedicada la partitura): la presentación y transformación de un motivo como parte de la arquitectura sonora de amplios trazos, estructurada en dos grandes bloques, mismos que presentan los cambios de dinámica que reclama la tradición.
Fuente: Diario de xalapa.com