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Nueva forma de educar a las nuevas generaciones no debe ser confundida, advierte Psicólogo

 Es importante establecer normas y límites, expone el profesionista Bruce Lau Figueroa.

La disciplina positiva es una nueva forma de vivir y de criar a las nuevas generaciones que se basa en el respeto mutuo entre padres e hijos, y que pone el acento en una crianza afectuosa con apego.

El Psicólogo Bruce Rogelio Lau Figueroa, comentó que cuando un adulto se ocupa de la educación de un niño pone en marcha una serie de prácticas que engloban actitudes, conductas y creencias, que tienen como finalidad enseñarle y encaminar su desarrollo.

“Hay que tener en cuenta que el cambio en la forma de educar es mediante ciertos procesos y análisis de estudios para mejorar de alguna manera la forma de educar a las nuevas generaciones.

Actualmente se podría considerar que se hacen adecuaciones educativas para la nueva niñez que está más al día con la tecnología, es benéfico para los niños que tienen la capacidad intelectual propicia para cada tendencias educativas. No es benéfico para los niños que tienen problemas de aprendizaje y no se adaptan tan fácilmente a estas nuevas formas de enseñanza”, dijo.

Comunicó que la nueva forma de educar a la infancia no debe de ser confundida con cumplir caprichos, pues de lo que se trata es que esta nueva tendencia de educar sea inclusiva tanto para los padres de familia como para el mismo maestro en el aula.

“Los maestros han tenido que hacer adecuaciones en el aula ya que se estaba acostumbrado a que la misma educación para todos, pero actualmente hay grupos en la primaria, de hecho desde los kínderes donde hay niños con obstáculos educativos.

Los padres deben de contribuir, primero aceptando a su hijo sea la condición que tengan, los padres entran en conflicto con estas nueva forma de enseñanza. Es más que nada la falta de información ya que esta nueva forma de enseñar involucra a todas las partes, desde los padres, a los niños y a maestros del aula”, insistió.

Refirió que el término “disciplina” tiene muy mala fama al estar asociado a connotaciones negativas y a modelos educativos que se alejan del respeto al niño y de los afectos.

Sin embargo, para educar a los niños y que aprendan a ser responsables de sus actos, y a saber lo que pueden y no pueden hacer, es importante establecer normas y límites. Hay que distinguir, por tanto, entre la disciplina positiva y otros estilos educativos menos eficaces.

 

fuente presencia.com