Ciudad de México. Como parte de las conmemoraciones del cincuentenario de los Juegos Olímpicos de México 1968, el Museo Nacional de las Culturas del Mundo inauguró este viernes la muestra Vera 68, que aborda la vida y trayectoria de Věra Časlavská (1942-2016), la multimedallista olímpica checoslovaca cuyos carisma y valor, junto con sus habilidades deportivas, le valieron el sobrenombre de “La novia de México”.
La ceremonia fue encabezada por Radka Časlavská, hija de la gimnasta; el embajador de la República Checa en México, L’ubomír Hladík; la directora de ese espacio museístico, Gloria Artís; y el director del Instituto del Deporte de la Ciudad de México, Horacio de la Vega, quien es también responsable de la organización de los festejos por el cincuentenario de esa justa olímpica.
Para Radka Časlavská, esta exposición representa “un momento muy importante” para México y la República Checa al permitir recordar un personaje que en 1968 estrecho la amistad entre ambas naciones.
La hija de la gimnasta –quien fue siete veces campeona olímpica y obtuvo además cuatro campeonatos mundiales y 11 títulos europeos– recordó el amor que Věra Časlavská siempre profesó por nuestro país y cómo le inculcó a ella a también amarlo y respetarlo.
El embajador L’ubomír Hladík destacó el trascendente papel que Věra Časlavská desempeña en la historia de la República Checa, país que el próximo 28 de octubre cumplirá un centenario de existencia.
Importancia que, explicó, no se limita sólo al terreno deportivo, al ser una de las más grandes gimnastas de todos los tiempos, sino que tiene que ver también con su firme consciencia crítica y su pública oposición a la invasión rusa a Checoslovaquia en agosto de 1968.
“En Checoslovaquia hubo un proceso de reformas políticas, económicas y sociales que se conoce como La Primavera de Praga. Lamentablemente, todo se acabó con la invasión de la Unión Soviética el 21 de agosto de 1968, hecho que Věra asumió con una oposición sin concesiones”, refirió el diplomático.
El embajador checo narró que la gimnasta tuvo que prepararse clandestinamente para su participación en la olimpiada mexicana y recordó cómo la protesta silenciosa que hizo durante una ceremonia de premiación a una competida rusa en esa justa, al inclinar la cabeza hacia un costado y bajar la vista mientras se tocaba el himno de ese país, le costó al regresar a su país años de persecución del régimen comunista.
Justo de ése y más episodios históricos es de lo que rinde testimonio la muestra Vera 68, conformada por fotografías, documentos, publicaciones deportivas, medallas y trofeos, un video, trajes de gimnasia, condecoraciones y el vestido de novia que Věra Časlavská utilizó cuando contrajo matrimonio en la Catedral de México con Josef Odlozil en plenos juegos olímpicos, evento al que asistieron cientos de sus seguidores y a partir del cual se le nombró “La novia de México”.
La muestra ocupa dos salas de Museo Nacional de las Culturas , ubicado en Moneda 13, Centro Histórico.
Fuente jornada.com.mx