El candidato de la coalición ‘Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador, reiteró que no es lo suyo la venganza pero si habrá justicia.
Así lo planteó ante cientos de seguidores el día en que Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), exhortara al político tabasqueño a un trato “tolerante” con los empresarios al escribir en sus redes sociales que “Desde @Coparmex hacemos un llamado a la tolerancia a @lopezobrador_ , erradicando imputaciones calumniosas en contra de empresarios que como Germán Larrea, expresan en ejercicio de la libertad, su visión del País, orientación del gobierno o el perfil de los gobernantes que requiere”. La reacción de la Coparmex se da un día después de que se conociera que Germán Larrea, presidente de Grupo México, pidió a sus trabajadores no votar por un “modelo populista”.
“Lo qué pasó, pasó, ahora vamos a inaugurar una etapa nueva”, enfatizó el abanderado presidencial por el Movimiento de Regeneración Nacional y los partidos del Trabajo y Encuentro Social.
Al pedir unidad independientemente de la inclinación política de sus seguidores, pues argumentó el político tabasqueño, “en estos 31 días que faltan van a pertenecer al partido que va a transformar México”, López Obrador insistió en que solo hay “un grupo que oprime y aplasta, son 100 los que se creen amos de México y ni siquiera viven en el país y aquí nos tienen, peleándonos a nosotros”.
“No, para nada”, rechazo al insistir en la unidad de los mexicanos y sugerir que se haga “a un lado a la mafia del poder”.
En esta línea, López Obrador subrayó que “no es mi fuerte la venganza, va a haber justicia, no los vamos a perseguir, no va a ser un acto autoritario. Yo no odio a nadie, a mi me mueve el amor y yo sé lo que es el perdón. No estoy luchando por la ira que tengo, no, estoy luchando por las convicciones, por los ideales que tengo, no vamos a perseguir a nadie de la mafia del poder, no se van a tener que ir al destierro. La única cosa es que se les va a hacer a un lado, ya no van a ser ellos, los amos de México”, sentenció.
Asimismo, remarcó que no se pueden seguir aplicando los “nefastos gasolinazos, vamos a ahorrar todo lo que se roban y se cortarán los privilegios que paga el pueblo”, sugirió.
También recordó que buscará atender la demanda juvenil de ingreso a las escuelas y que les abrirá camino a un primer empleo a través de una tutoría de los empresarios, industriales o comerciantes que guiarán a los “aprendices” y sentenció que ya no van a haber “privatizaciones” de los bienes de la nación.
“Nada de proyectos que se impongan de presas y de todo lo que ustedes han padecido, para que ya no se afecte a las
comunidades indígenas”, comentó a sus seguidores en la costa chica oaxaqueña.
“Nosotros no vamos a imponer nada, no se va a privatizar el agua, el ISSSTE ni el IMSS, al contrario se van a mejorar los servicios públicos; se acabó la política del saqueo”.
Finalmente, antes de partir, expresó en respaldo a los cuadros políticos femeninos de su movimiento: “¡Arriba las mujeres! ya hay que dejar a un lado el machismo. La mujer es más decidida, más trabajadora, más honrada que el hombre y al que no le guste que se vaya a volar en el avión de (el presidente Enrique) Peña Nieto”.