“Perro con hueso en la boca, ni muerde ni ladra”.
Porfirio Diaz.
San Andrés Tuxtla, Ver. -Sandro Francisco Gómez Valdés, dirigente estatal de la llamada Red de Jóvenes por México en Veracruz, renuncio a su militancia partidista, llamado PRI, eso se veía venir, ante la bipolaridad e incongruencia de un joven malagradecido y desleal que al no cumplirle a sus caprichos se vendió por unas cuantas monedas, falso, farsante o mentiroso con cualquier adjetivo calificativo, lo conocí desde que llego a la dirigencia de donde obtuvo canonjías y prebendas que lo beneficiaron personalmente al igual que otras peticiones para sus amiguitos.
Su padre hablaba de tener a un hijo leal y agradecido con su partido, eso lo presumía su padre, un hombre que se veía recto, honesto y que había hecho de Sandro un muchacho con responsabilidades y agradecimientos mutuo a su partidismo, no fue así, le fallo a su padre y vendió tan caro su amor a la militancia por caprichos y dicen por ahí por unos cuantos pesos (hablan de millones) para un puñado de jóvenes.
No le fallo a su red de jóvenes a quienes los lleva a otro lado, le falla a la memoria de su familia, a quien sin decirles agua va, hoy se vestirán de otro color, y su padre oriundo de Rinconada, lo recriminaran por tener un hijo chaquetero, que los traiciono y les fallo con ese orgullo de ser un joven que según tenía un compromiso con la sociedad, nada más que falso, cuando se da cuenta que eso es mentira y que esa dará pie para criticas de su inestabilidad emocional.
Sandro un joven metido ya en temas de incredulidad que a su edad, lleva una ventaja de olvido, en nada perjudica y daña su ausencia y su faramalla de mentir quemando playeras porque realmente no significa nada de nada, pero si su palabra prometida ante su padre y el orgullo que sentía su padre por él, lo ha tirado al piso, para ser arrastrada por las críticas y las voces que lo conocen que saben que lo que está diciendo es más falso que la canción aquella que dice, “Cuan falso fue tu amor, me has engañado. El juramento aquel era fingido.
En fin, pasemos a otra cosa…mañana inician campaña los candidatos a diputados locales, y la vida política se incrementará aún más, aunque en estos momentos se viven campañas a diputados federales, los únicos que suenan en el distrito electoral de los Tuxtlas, son dos nada más, Rafael Fararoni Mortera y Manuel Rosendo Pelayo, de los demás se perdieron en el espacio electoral del distrito de los Tuxtlas.
En Santiago Tuxtla, Santiago Avendaño Barrios candidato del Verde Ecologista y PRI, inicia campaña no en la cabecera distrital sino en uno de los municipios de su jurisdicción electoral, en Carlos A. Carrillo, ahí estará iniciando campaña en busca del voto popular donde pretende incorporarse al núcleo poblacional cañero de ese municipio, reuniéndose con todos sin excepción de nadie, indicando ser incluyente y sobre todo sin colores uno a uno, codo a codo, y dando lo mejor de sí, para buscar el voto en ese municipio.
En San Andrés Tuxtla, también inician campaña, y aun sin definir donde será el inicio de sus actividades electorales, Lily Pérez por la alianza PRD-PAN, comenzara a trabajar a partir de mañana, aunque se dice podría ser en los primeros minutos de este mismo 29 de mayo haciendo un recorrido por las principales calles de la ciudad, pero esto aún sin definir nada, estaremos informándoles.
P: D.-En este proceso electoral para las diputaciones locales, saldrá a relucir el oído, la envidia, los rencores, pero sobre todo la perversidad de los simpatizantes de cada candidato y principalmente de sus seguidores quienes se tiran a matar y dan el todo por el todo y son capaces de tirarse de la iglesia catedral y al final de las campañas y cuando viene el triunfo, les dan una patada por el trasero así que hagan lo que hagan en campaña recuerden lo que les digo a lo último no den todo porque a final de cuentas los triunfos electorales son de una sola persona y en una diputación no ganan nada más que el candidato pero si pierde lo odiaran como nunca en su vida y más si Usted tuvo algo que ver en la campaña, hágalo bien pero no exagere.