Sólo ocho aerolíneas internacionales, entre ellas las españolas Iberia, Air Europa y Plus Ultra, mantienen su actividad en el país
El Departamento de Transporte de Estados Unidos acaba de anunciar la suspensión indefinida de todos los vuelos de pasajeros o carga con Venezuela, alegando la falta de seguridad en ese país.
La decisión ha sido adoptada a instancias del Departamento de Seguridad Interior, que ha dictaminado que “la inestabilidad política” en situación en Venezuela “constituye una amenaza para la seguridad de los pasajeros, los aparatos y las tripulaciones”.
La decisión es un paso más en el aislamiento del régimen de Nicolás Maduro. A medida que la seguridad interna en Venezuela se han ido colapsando por la crisis política y económica del país, las aerolíneas internacionales han ido cortando sus vuelos a ese país. El mes pasado, las autoridades estadounidenses prohibieron a los aviones de ese país bajar de 26.000 metros de altura (7.925 metros) cuando sobrevuelen Venezuela. En abril, la principal aerolínea estadounidense que realizaba vuelos de ese país a Venezuela, American Airlines, suspendió sus operaciones en ese país por la falta de seguridad.
La medida tomada por Washington provocó un revuelo inmediato en Venezuela, un país que ya sufre un aislamiento de enormes proporciones. De hecho, en la actualidad sólo tres vuelos diarios, a través de las compañías Láser, Estelar y Avior, unen los dos países. American Airlines dejó de volar a mediados de marzo hacia y desde Caracas y Maracaibo por la inseguridad reinante. Una medida temporal que ya se extiende casi dos meses.
Sólo ocho aerolíneas internacionales, entre ellas las españolas Iberia, Air Europa y Plus Ultra, mantienen su actividad en el país petrolero, tras reducir su número tradicionales de vuelos. Primero fueron las deudas impagadas por el gobierno revolucionario, que ascienden a casi 4.000 millones de dólares, lo que provocó el abandona de sus rutas de compañías como Avianca y Alitalia. Luego fue la inestabilidad política la que forzó a otras que habían aguantado la crisis económica. En la actualidad, además de las citadas, mantienen operaciones la panameña Copa, Air France, TAP Portugal y Caribbean Airlines, además de Turkish Airlines, quien comenzó a operar el año pasado con unos vuelos muy polémicos. La oposición denunció que en esos aviones se sacaba oro del país.
Fuente: El Mundo.