Concluyó la 17 edición de Zona Maco. Se marcharon los 220 galeristas que participaron en la feria de arte contemporáneo, la más importante de Latinoamérica, con distintas vivencias, ventas, intercambios y con obras que no vendieron. Pero lo que todas se llevaron fue la experiencia de cómo en redes sociales Zona Maco fue centro del escándalo, luego del incidente que protagonizó Avelina Lésper, al ser acusada de haber destruido la obra del artista Gabriel Rico —cotizada en 20 mil dólares— y de huir del lugar para no asumir su responsabilidad. La crítica de arte indicó que desearía que no hubiera ocurrido ese incidente, ya que eso le pudo pasar a cualquiera, pero se disculpó con el artista y con la galería y agradeció que esto no se llevara a otras instancias. “Es algo que sucede con estos objetos, es su naturaleza, se los lleva la basura, se los come la gente. No es una tragedia, se puede reparar, no es algo intencional: no agredo obras… lamentable me sucedió a mí pero le pudo pasar a otra persona que pasara cerca de la pieza, es todo”, expresó Lésper. La galería OMR, a través de un comunicado, difundió que a pesar de que parece haber sido accidental y que es irrelevante cómo sucedió, la acción de Lésper, de acercarse demasiado a la obra para ponerle una lata de refresco encima y tomarse una foto para hacer una crítica, sin duda ocasionó el destrozo, y es sobre todas las cosas una enorme “falta de profesionalismo y respeto”. La oferta Pero Zona Maco fue más que eso: exhibición de propuestas, obras sorprendentes, piezas monumentales como la de Zhivago Duncan, que pesa alrededor de una tonelada y que su valor es de 200 mil dólares, se pudo disfrutar. El mercado de la informalidad, que por primera vez tuvo un lugar en esta feria, sorprendió con la obra Se vende Zona Maco, una USB con la historia de la feria creada por Zélika García. El público gozó del montaje de la galería Lisson, de Londres, una de las más reconocidas dentro del mercado del arte, la cual regresó a la feria con obras de artistas como Ai Weiwei y Anish Kapoor. Disfrutaron también de la presencia de artistas que son una leyenda en el arte en México, como Manuel Felguérez —que celebra sus 90 años activo—, quien caminó por Zona Maco y se tomó fotos con quien se lo pedía, pues su obra se exhibió a lo largo de seis metros del stand de Durban Segnini Gallery. Gabriel Orozco, artista mexicano, quien ya ha tenido una exposición en el Museo de Arte de Nueva York (MoMA), fue otro de los artistas que acudió a la feria, y detalló que en abril presentará el Plan Maestro para la rehabilitación del Bosque de Chapultepec, el cual contempla 12 nuevos espacios, entre ellos: el Museo del Maíz, la Universidad de la Salud, una Bodega Nacional de Museos y el Pabellón de arte contemporáneo. Mireles compra piezas el último día de adquisición El doctor José Manuel Mireles, el ex líder de las autodefensas y actual subdelegado médico del Issste en Michoacán, acudió el último día de la realización de Zona Maco para comprar piezas de arte: “Ya tenemos vistas algunas obras, estamos pendientes de la decisión final”, declaró sin detallar cuáles serían las elegidas. Concluyó la 17 edición de Zona Maco. Se marcharon los 220 galeristas que participaron en la feria de arte contemporáneo, la más importante de Latinoamérica, con distintas vivencias, ventas, intercambios y con obras que no vendieron. Pero lo que todas se llevaron fue la experiencia de cómo en redes sociales Zona Maco fue centro del escándalo, luego del incidente que protagonizó Avelina Lésper, al ser acusada de haber destruido la obra del artista Gabriel Rico —cotizada en 20 mil dólares— y de huir del lugar para no asumir su responsabilidad. La crítica de arte indicó que desearía que no hubiera ocurrido ese incidente, ya que eso le pudo pasar a cualquiera, pero se disculpó con el artista y con la galería y agradeció que esto no se llevara a otras instancias. “Es algo que sucede con estos objetos, es su naturaleza, se los lleva la basura, se los come la gente. No es una tragedia, se puede reparar, no es algo intencional: no agredo obras… lamentable me sucedió a mí pero le pudo pasar a otra persona que pasara cerca de la pieza, es todo”, expresó Lésper. La galería OMR, a través de un comunicado, difundió que a pesar de que parece haber sido accidental y que es irrelevante cómo sucedió, la acción de Lésper, de acercarse demasiado a la obra para ponerle una lata de refresco encima y tomarse una foto para hacer una crítica, sin duda ocasionó el destrozo, y es sobre todas las cosas una enorme “falta de profesionalismo y respeto”. La oferta Pero Zona Maco fue más que eso: exhibición de propuestas, obras sorprendentes, piezas monumentales como la de Zhivago Duncan, que pesa alrededor de una tonelada y que su valor es de 200 mil dólares, se pudo disfrutar. El mercado de la informalidad, que por primera vez tuvo un lugar en esta feria, sorprendió con la obra Se vende Zona Maco, una USB con la historia de la feria creada por Zélika García. El público gozó del montaje de la galería Lisson, de Londres, una de las más reconocidas dentro del mercado del arte, la cual regresó a la feria con obras de artistas como Ai Weiwei y Anish Kapoor. Disfrutaron también de la presencia de artistas que son una leyenda en el arte en México, como Manuel Felguérez —que celebra sus 90 años activo—, quien caminó por Zona Maco y se tomó fotos con quien se lo pedía, pues su obra se exhibió a lo largo de seis metros del stand de Durban Segnini Gallery. Gabriel Orozco, artista mexicano, quien ya ha tenido una exposición en el Museo de Arte de Nueva York (MoMA), fue otro de los artistas que acudió a la feria, y detalló que en abril presentará el Plan Maestro para la rehabilitación del Bosque de Chapultepec, el cual contempla 12 nuevos https://www.milenio.com/cultura/obras-sorprendentes-polemica-concluye-feria-arte.
fuente: milenio.com